El uso de los aceites esenciales se conoce desde hace mucho tiempo, y durante la Covid-19, se puso de moda para ayudar en todo, desde el dolor de cabeza hasta la ansiedad. Pero, ¿funcionan realmente estos aceites concentrados a base de plantas; y sí, son seguros? Por desgracia, no hay suficientes investigaciones para afirmar su beneficio médico, pero los estudios del laboratorio John Hopkins descubrieron que los aceites de ajo y de varias otras hierbas comunes y plantas medicinales podían matar un tipo de bacteria de Lyme mejor que los antibióticos. Es, por tanto, prometedor.
Los aceites esenciales son, básicamente, extractos de plantas; se elaboran mediante la vaporización o el prensado de diversas partes de la planta -como la flor, las hierbas, la corteza, las hojas, las raíces y los frutos- para obtener el extracto que produce la fragancia. Para una sola botella de aceite esencial se necesitan varios kilos de plantas. Tomemos como ejemplo el aceite esencial de lavanda; para 0,5 kg, los aceites esenciales necesitan unos 90 kg de flores de lavanda. Además de crear un aroma, los aceites esenciales también desempeñan otras funciones en las plantas.
Los aceites esenciales se suelen utilizar en aromaterapia. La aromaterapia se conoce como la práctica de utilizar los aceites esenciales para obtener beneficios terapéuticos. Cuando se inhalan, los aceites pueden activar ciertas áreas de nuestro cerebro, como en el sistema límbico, que desempeña un papel en nuestras emociones. También pueden afectar al hipotálamo, que puede responder al aceite creando sustancias químicas cerebrales que nos hacen sentir bien, como la serotonina. Los aceites esenciales también pueden ser absorbidos por la piel; cuando hacemos un masaje, el masajista suele añadir una o dos gotas de aceite de lavanda para ayudarnos a relajarnos y aceite de gaulteria para aflojar los músculos tensos.
Los aceites esenciales son una terapia complementaria; no hay ninguna evidencia médica que afirme que curan enfermedades. Sin embargo, los expertos afirman que se pueden utilizar como apoyo al tratamiento convencional de las distintas afecciones. Las investigaciones también demuestran que la aromaterapia tiene los siguientes beneficios
Los aceites esenciales son muy intensos, de ahí que algunos expertos recomienden ser conscientes de cómo los estamos utilizando. Sólo se requieren pequeñas dosis, y recordar que no hay que utilizarlos de forma rutinaria, ya que nuestro cuerpo puede acostumbrarse a ellos y disminuir su eficacia. Además, no todos los aceites esenciales que se encuentran en el mercado son puros; a veces, están diluidos con ingredientes menos costosos; por lo tanto, debemos comprobar la etiqueta y se supone que no deben ser ingeridos. Como cualquier otro, los aceites esenciales pueden causar efectos secundarios como irritación y reacciones alérgicas leves. Por eso, si vas a utilizarlo por primera vez, úsalo en una cantidad mínima para ver si tienes una reacción a él. Los aceites esenciales como la bergamota, la corteza de canela, el jazmín, la hierba de limón, la manzanilla y el aceite de orégano suelen ser problemáticos.
John Hopkins Medicine aconseja no utilizar difusores de aceites esenciales -un aparato que crea vapores perfumados- si hay otras personas en la casa. El uso de un difusor en una zona pública puede afectar a las personas de forma diferente. Por ejemplo, la menta suele recomendarse para los dolores de cabeza. Pero si lo usas cerca de un niño de menos de 30 meses, éste puede agitarse. Podría tener un efecto negativo. Además, una persona con latidos rápidos del corazón puede reaccionar negativamente a la menta.
La forma más segura de utilizar el aceite esencial es mezclarlo con un aceite portador, como el de oliva, jojoba o coco, para que no sea demasiado fuerte y se pueda masajear en la piel. También se puede utilizar un stick aromático, también llamado inhalador de aceites esenciales. Además, los accesorios de aromaterapia, como collares, pulseras y llaveros hechos con materiales absorbentes, son una gran opción; podemos aplicar aceites esenciales en ellos y olerlos.
Existen docenas de aceites esenciales que contienen diferentes fragancias y composiciones químicas. ¿Qué aceites esenciales son los mejores? Depende de lo que necesites y de los síntomas que tengas. Éstos son nuestros favoritos:
+ Words: Alvia Zuhadmono, Luxiders Magazine
Sustainable communication student | Sweden-based writer
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