La Magia De Las Setas
“El futuro de la moda son los hongos” destaca en nuestros titulares recientemente. El uso mágico de los hongos también sigue extendiéndose a la industria del bienestar y la salud y (por supuesto) a la alimentación. No sólo eso, sino que los hongos también demuestran ser elegantes. Firmas de moda de renombre como Stella McCartney, Rahul Mishra, Iris Van Herpen y Hermès, por nombrar algunas, utilizan el humilde y terrenal hongo como inspiración y material para sus colecciones… ¡Adentrémonos en el reino de los hongos!
El cambio climático ha transformado la actitud de las empresas y los negocios hacia los materiales ecológicos. Los consumidores son más conscientes de lo que consumen, del proceso de producción y del impacto en el medio ambiente. La demanda de prácticas y productos ecológicos es cada vez mayor y, por supuesto, las marcas tienen que escuchar y, bueno… dar la bienvenida al frenesí de los hongos.
EL AUGE DE LOS HONGOS
Aunque el uso de los hongos a cambio de piel está en boga en el ámbito de la moda en estos momentos y brota (aún más) en otras industrias, pero esta apreciación de los hongos no es nueva. Se remonta a finales de los años 60: en esta época, los hongos se abrieron paso en el descubrimiento medicinal y en las tradiciones religiosas. Los chinos creen en los poderes curativos del hongo reishi o “hongo de la inmortalidad”. El reishi es el hongo más antiguo que se utiliza en la medicina china para beneficiar al sistema inmunológico humano.
Las investigaciones realizadas por Paul Stamets y Heather Zwickey señalan la variedad de usos y la diversidad de efectos de los hongos y el hecho de que pueden perjudicarnos gravemente. Pero con la tecnología y la ciencia moderna, afirman:
“Hemos reconocido el valor de los hongos; hemos empezado a cultivarlos para explotar más sus fines medicinales… Ahora estamos metidos de lleno en una revolución científica de hongos medicinales que está surgiendo rápidamente”.
Además, los científicos utilizan el micelio -el vegetal filiforme de los hongos- para sustituir el material de envasado de plástico por uno de mente como el que hace Evocative Design. Utilizan el micelio para productos de cuidado de la piel, como las mascarillas. En los años 90, Phil Rose introdujo muebles hechos con hongos que asombraron a mucha gente; creó “sillones”, mesas e incluso ladrillos duraderos: en 2009 construyó una casa de té con ladrillos de micelio. En la escena artística, se le conoce como micólogo artesano. El fabricante de muebles londinense Sebastian Cox también es uno de los artistas que se valen del micelio para crear su obra maestra.
“La pregunta no es: ‘¿Qué pueden hacer los hongos? Es: ‘¿Qué quieres que haga? Los hongos son agentes transformadores en el sentido más estricto de la palabra” -Phil Rose
En la industria de la alimentación y las bebidas, los distintos tipos de hongos aportan diversos beneficios para la salud y las vitaminas. Y por su textura, los hongos prosperan en el mercado alternativo como café, zumo, cerveza y sustituto de la carne. Con el auge de los productos de origen vegetal, los hongos se están abriendo camino para ser los ingredientes más codiciados y una inversión de capital riesgo.
EL BOOM DE LOS HONGOS EN LA MODA
Con el impacto de la moda rápida y sus consumidores, nos hace preguntarnos si hay alguna forma de comprar moda sin culpa y sin dañar el medio ambiente. Según Naciones Unidas, la industria de la moda es uno de los negocios más contaminantes del mundo. La producción de productos textiles y de cuero plantea problemas medioambientales, por no hablar de su eliminación.
Dicho esto, las marcas tienen el reto de afrontar el problema y ser más sostenibles en la práctica. El esfuerzo comenzó con la forma de fabricar los tejidos. Por eso, el cuero fabricado a partir de micelio se considera una opción mejor para el medio ambiente: bajo consumo y biodegradabilidad.
Dan Widmaier, director general de Bolt Threads, se dio cuenta de que la industria de la moda necesitaba urgentemente buscar una alternativa ecológica a su práctica. En 2009, su empresa de innovación biotecnológica entró en el sector e introdujo la moda con hongos. Ocho años después, en 2017, la empresa se asoció con Stella McCartney para crear un vestido ecológico hecho con proteínas de seda hiladas por arañas. El paso siguió con la creación de Mylo que se especializó en la producción de micelio principalmente para la industria de la moda. A principios de este año, se asociaron para lanzar su primera colección de prendas hechas con cuero de hongos.
Mientras que el micelio no es accesible para muchos y es exclusivo sólo para grandes marcas, EDEN Power Corp colabora con pequeños artesanos. Issac Laroce y Florence Provencher Proulx, fundadores de EDEN, introdujeron en el mercado una marca de ropa de calle con conciencia ecológica y en su colección primavera-verano 2021 aparece “Mycelium” con el icónico sombrero de hongo Amandou.
Según MycoWorks, la limitación de la piel de micelio se debe a los procesos agrícolas utilizados para cultivar las setas. Al igual que la producción de vinos o quesos finos, requiere el control de la temperatura, la humedad y otros factores ambientales. MycoWorks, que ha colaborado recientemente con Hermès, lanzará Reishi en 2020. “El reishi no es cuero. El reishi es más que el cuero”, dijo Matt Scullin, director ejecutivo de MycoWorks. La empresa afirma que el Reishi supera al cuero en resistencia y se equipara al cuero en durabilidad y apariencia
“Se siente como el cuero; se ve como el cuero, por lo que hablamos de él como cuero, pero no es cuero. Podría ser una solución mejor para el planeta” -Matt Scullin.
La cuestión es si las setas serán el superhéroe de la industria de la moda que ofrezca una solución a los enormes problemas medioambientales a los que se enfrenta la industria. Tal vez, podamos esperar que los hongos no sean un salvador, sino más bien “una esperanza para un mañana mejor”. Teniendo en cuenta la naturaleza de los hongos -biodegradables, coloridos, resistentes, comestibles y con propiedades medicinales-, lo cierto es que las setas van a permanecer durante mucho tiempo.
+ Words: Alvia Zuhadmono, Luxiders Magazine