¿Deberíamos viajar tras una catástrofe natural?

 

 

Nuestro destino de vacaciones ha sido recientemente víctima de una catástrofe natural. ¿Deberíamos posponer nuestro viaje? ¿Cuánto tiempo debemos esperar? Después de una catástrofe natural, es difícil saber cuándo es demasiado pronto para visitar un destino. ¿Estamos ayudando o dificultando la recuperación del lugar? Aquí explicamos qué hacer y cuándo hacerlo.

 

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En agosto, devastadores incendios forestales sacudieron Maui, causando importantes pérdidas y destrucción. El Departamento de Empresas, Desarrollo Económico y Turismo informó de que los incendios provocaron la muerte de 115 personas, destruyeron más de 2.000 viviendas. También afectaron a unos 800 establecimientos comerciales y a unos 7.000 empleados. En octubre, Maui Occidental reabrió gradualmente sus puertas a los visitantes, provocando reacciones mixtas. Algunos residentes, que seguían lidiando con la pérdida y el desplazamiento, expresaron su enfado, mientras que otros reconocieron la necesidad de reactivar la economía dependiente del turismo. El mismo año, Marruecos, Turquía y Siria sufrieron terremotos devastadores que costaron la vida a miles de personas. Como turistas conscientes y responsables, queremos ayudar, pero la pregunta sigue en el aire: ¿Visitamos ahora o esperamos un poco más?

 
 
 

ENTENDIENDO LA CATÁSTROFE NATURAL

En primer lugar, debemos investigar a fondo. Oír noticias sobre una catástrofe natural en un país o una región puede hacernos entrar en pánico o preocuparnos por nuestra seguridad. Sin embargo, muchos desastres naturales tienen un impacto localizado, dejando intactas otras zonas. Por ejemplo, National Geographic señala que los incendios en Australia en 2019 provocaron un descenso del 60% en las reservas de alojamiento en zonas que no se vieron afectadas por los incendios forestales. Del mismo modo, las reservas en Estambul cayeron más de un 30% en 2023, a pesar de que la ciudad se encuentra a más de 800 kilómetros del epicentro de la catástrofe.

Evitar por completo un destino afectado puede ser perjudicial. Muchos de estos destinos dependen del turismo. Según el departamento de turismo local de Maui, la falta de turismo provocó una pérdida diaria de 2,7 millones de dólares. Economy Middle East informa de que el turismo es vital para la economía marroquí y el terremoto podría provocar una pérdida equivalente al 8% del PIB debido a la falta de turismo. Por lo tanto, contar con la mentalidad correcta, el momento adecuado y entender la situación puede marcar la diferencia para que nosotros, como turistas, seamos parte de la solución.

 

DEJEMOS QUE LOS PROFESIONALES HAGAN SU TRABAJO

La Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) explica que hay 4 etapas en la gestión de catástrofes. En primer lugar, hay que ocuparse de la mitigación y la preparación antes de la catástrofe para prevenir y controlar los daños. Las dos etapas posteriores, respuesta y recuperación, son una vez que se produce la catástrofe. La respuesta es la parte inmediatamente posterior a la catástrofe natural. Aquí, la seguridad y el bienestar de las personas afectadas es la prioridad. Esto significa que en el lugar de los hechos sólo debe haber personal de emergencia cualificado. A pesar de querer actuar en buena fe, los voluntarios inexpertos podrían obstaculizar una respuesta eficaz.

A continuación, podemos empezar a planificar nuestras visitas durante la fase de recuperación. Ésta implica la reconstrucción de infraestructuras y viviendas, así como la reestructuración de la economía local. Sin embargo, no existe una norma clara sobre cuándo es apropiado regresar. Algunas zonas menos afectadas pueden estar preparadas para recibir visitantes en un par de meses, mientras que otras zonas más gravemente afectadas pueden necesitar más tiempo para recuperarse. Dependiendo de la gravedad de cada situación, puede ser aconsejable esperar hasta que el proceso de recuperación haya avanzado significativamente, dando prioridad a infraestructuras esenciales como hospitales frente a complejos turísticos u hoteles. Además, si queremos ser voluntarios en el momento adecuado, recomendamos buscar programas reconocidos por el gobierno que marquen una diferencia significativa, alineándose con las necesidades específicas de la comunidad.

 
 

CÓMO FACILITAR LA SITUACIÓN A LOS AFECTADOS POR UNA CATÁSTROFE NATURAL

Una vez que las autoridades lo consideran seguro y las comunidades están preparadas para acoger a los visitantes, hay medidas que podemos tomar para formar parte de la solución. Antes de reservar alojamiento, debemos ser conscientes de la situación sobre el terreno. Aunque las autoridades declaren que un destino está listo, muchos hoteles podrían estar albergando a residentes que perdieron sus hogares. Por ejemplo, en Maui Occidental, un número significativo de los 7.500 residentes desplazados residen temporalmente en hoteles mientras se llevan a cabo las labores de recuperación. Cuando el destino reabra y se reanuden las reservas hoteleras, estos residentes podrían verse desplazados de nuevo.

Podemos investigar proactivamente la disponibilidad de hoteles y ponernos en contacto con ellos directamente para asegurarnos de que nuestra visita no contribuya a este problema. Además, es aconsejable elegir hoteles que apoyen activamente a la comunidad local y se comprometan con ella. Recomendamos buscar alojamientos con prácticas éticas que den prioridad al bienestar de la comunidad local y considerar opciones que fomenten el empleo y las pequeñas y medianas empresas locales.

 

SER MÁS HUMANOS

Debemos recordar que la gente está de duelo. Muchas víctimas pueden haber perdido un hogar o un ser querido. Como turistas, debemos ser humildes y compasivos con el tema. En ese aspecto, debemos evitar hacer fotos de las zonas afectadas. A pesar de nuestra curiosidad, no debemos mirar fijamente ni crear un ambiente turístico en torno a los lugares afectados. Es importante ser respetuosos y dar a los residentes privacidad para procesar las pérdidas.

Del mismo modo, no hay un tiempo establecido para la recuperación emocional. El plazo determinado para volver a abrir los lugares al turismo puede parecer precipitado. Como menciona ABC News, los residentes de Maui redactaron una petición con más de 5.000 firmas para retrasar la vuelta del turismo, ya que la comunidad no se siente preparada. Escuchar las necesidades de la comunidad es importante para construir un turismo respetuoso y sostenible.

 
 

EN CONCLUSIÓN...

Existen pautas generales que pueden ayudarnos a determinar cuándo un destino está listo para recibir turistas tras una catástrofe natural. No debemos dejar que el impacto inicial de la noticia nos desanime a la hora de considerar un destino. Las autoridades locales nos informarán cuando sea seguro y apropiado para los turistas visitarlo. Sin embargo, aunque las autoridades declaren que el destino está listo, puede que la comunidad no piense lo mismo. Investigar un poco y abordar la situación con empatía puede proporcionar una comprensión más clara del proceso de recuperación y del sentimiento de la comunidad hacia el regreso de los turistas.

Aunque estemos ansiosos por visitar un lugar para ayudar a estimular la economía, es importante hacerlo cuando los locales crean que es el momento adecuado. Este enfoque puede conducir a una experiencia más positiva tanto para los visitantes como para los residentes. No obstante, puede requerir algo de paciencia por nuestra parte.

Mientras tanto, hay otras formas de contribuir. Las donaciones a través de canales oficiales y las colaboraciones con ONG son una gran opción para apoyar a las zonas afectadas. Incluso podemos ponernos en contacto con nuestras agencias turísticas u hoteles y preguntar cuáles son las necesidades específicas de la zona que pensamos visitar.

 
 

+ Highlight Image:

  © Marcus Kauffman via Unsplash

+ Words: 

Francesco Witt

Luxiders Magazine