¿Cuál es la leche más sostenible del mercado?

 

 

Productos básicos como la avena, el arroz, las almendras y el coco pasan por una cierta alquimia para convertirse en una leche de preferencia en nuestros refrigeradores y tazas de café. Pero, ¿qué prácticas se llevan a cabo en la creación de la leche? ¿Cómo de sostenibles son estas leches? Examinemos los procesos detrás de cada uno de estos tipos de leche.

 
 

AVENA

Sabor:

Cremosa con un sabor suave y a nuez, la leche de avena es una de las más consumidas en el mundo vegano y vegetariano. Esta leche es ideal para personas con alergias alimentarias y contiene más proteínas que la mayoría de las leches veganas.

Hechos:

La leche de avena está de moda en la actualidad en relación con los tipos de leche de origen vegetal. Un vaso normal de leche de avena (200 ml) genera 0,18 kg de CO2. Un litro de leche de avena requiere unos 48 litros de agua para producirse. Esto es más que lo que necesita la leche de almendras y menos que leche de soja y vaca. El área donde la leche de avena sobresale dentro del espectro de la sostenibilidad, es la tierra que se necesita para ser producirla. La avena requiere un 80% menos de tierra para crecer que la vaca.

Evaluación final:

Es importante señalar que diferentes marcas de leche utilizarán diferentes métodos de producción; algunos son más sostenibles que otros. La marca Oatly enumera en su proceso de producción que utilizan solo 0,34 kg de emisiones de gases de efecto invernadero en la producción, por ejemplo, que es menos que el promedio de la leche de avena. La marca en sí está comprometida en gran medida con la sostenibilidad y se comercializa de esta manera. También tienen la patente original sobre cómo hacer leche de avena y han jugado un papel importante en el éxito de la leche de avena. Ten en cuenta los métodos de producción de la marca al comprar leche de avena.

 

ARROZ

Sabor:

La leche de arroz tiende a ser ligera, aguada y refrescante en general, pero no tiene una textura cremosa ni un sabor robusto.

Hechos:

El mayor impacto ambiental de todas las leches vegetales se deriva de la leche de arroz, aunque todavía produce solo un tercio de los gases de efecto invernadero que produce la leche de vaca. La leche de vaca produce 3,2 kilogramos de CO2, mientras que la leche de arroz produce 1,2 kg.

Evaluación final:

La sostenibilidad de la leche de arroz puede variar según la ubicación. La mayor parte del arroz se exporta de países asiáticos como el jazmín de Tailandia y el basmati de la India, por ejemplo. El consumo de leche de arroz por parte de alguien que vive en el Este es más sostenible que el de alguien de Occidente debido al lugar donde se produce y exporta principalmente el arroz. Ten en cuenta la ubicación en relación con el producto básico cuando compres leche de arroz.

 
 
 
 
 

ALMENDRA

Sabor:

El nombre de la leche de almendras es fiel a su sabor. La almendra profundamente prevalece en todo el sabor, así como un regusto dulce y cálido.

Hechos:

La leche de almendras tiene la menor cantidad de emisión de gases de efecto invernadero de todas las leches del mercado y requiere menos tierra para crecer en comparación con la leche de soja y avena. Sin embargo, la leche de almendras requiere mucha agua para su producción. Un solo vaso de leche de almendras requiere 74 litros de agua, por ejemplo.

Evaluación final:

Es importante tener en cuenta el medio ambiente en el que se producen la mayoría de las almendras. La tabla de almendras de California afirma que produce el 80% de las almendras del mundo y el 100% para los EE. UU. California es un lugar muy afectado por la sequía. Dado que las almendras requieren tanta agua para crecer, es importante tener en cuenta los efectos perjudiciales de la producción de almendras en el medio ambiente de California.

 

COCO

Sabor:

Al igual que la leche de almendras, la leche de coco tiene un vínculo fuerte y obvio con su sabor. Tiene la fluidez del agua de coco, pero se hace suave y cremoso.

Hechos:

Las cáscaras de coco desechadas generalmente se queman después de que la carne y el jugo se hayan utilizado para la leche. Esta quema genera un exceso de emisiones de CO2 que no son saludables para la atmósfera.

Evaluación final:

Aproximadamente el 80% de los cocos provienen de países como Indonesia, Tailandia, Filipinas, India, Sri Lanka, Vietnam y Brasil. Aquellos que viven en Occidente y consumen leche de coco generalmente beben leche de coco que ha sido transportada a largas distancias que crean cantidades excesivas de emisiones de gases de efecto invernadero debido al transporte prolongado. Los cocos que provienen de Brasil se han cosechado con un impacto perjudicial en la selva amazónica; gran parte de la tierra de la selva amazónica se despeja para cultivar cocoteros y daña la biosfera. Es importante tener en cuenta el lugar de producción al comprar leche de coco.

 

LECHE DE VACA

Sabor:

La leche de vaca tiene un sabor lácteo tradicional. Tiene una de las texturas más suaves y cremosas de las leches. No hay restos de su origen en esta leche.

Hechos:

La leche de vaca es la menos sostenible de todos los tipos de leche. Un vaso de 8 onzas de leche de vaca emite 0,63 kg de emisiones de gases de efecto invernadero y utiliza 1,79 metros cuadrados de terreno. Sin mencionar que se utilizan 125,6 litros de agua para hacer un vaso de leche de vaca. Evidentemente, es la opción menos sostenible.

Evaluación final:

Esta leche es la opción menos sostenible que cualquiera de las leches de origen vegetal. Sin embargo, es importante recordar que las leches vegetales no son completamente sostenibles por sí mismas.

 
 
 
 
 

Como muchas cosas, el consumo de leche por parte de los consumidores se basa en gran medida en el poder del marketing. La leche vegetal se ha vuelto más popular en los últimos años debido a la tendencia de una vida respetuosa con el medio ambiente. Parece que cualquiera que use leche vegetal es un consumidor que respeta el medio ambiente. Sin embargo, es importante analizar en profundidad los diferentes tipos de leche que se utilizan y la producción que implica la creación de cada uno de ellos. La próxima vez que estés en la tienda buscando diferentes leches, será útil saber cuáles tienen qué impacto en el medio ambiente.

 

 

   +  Words: Isabella Cammarata, Luxiders Magazine Jr Editor

IG @bellcamm_

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