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Biodiversidad | Una buena respuesta para la moda sostenible

 

La biodiversidad puede ser la respuesta de la moda para un futuro sostenible. La naturaleza ha inspirado la moda durante siglos, y algunos de los diseñadores más famosos (Versace, Dolce & Gabanna, Alexander McQueen) se inspiran directamente en el mundo natural para sus líneas de ropa. Sin embargo, a pesar de la importancia de la naturaleza para la moda, se muestra poco respeto en la producción de prendas y en los populares tejidos de moda rápida. Pero la esperanza no está perdida. La creciente concienciación de los consumidores en torno a la moda sostenible está incitando a los diseñadores a mirar hacia la biodiversidad para una alta costura más consciente.

 

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¿QUÉ ES LA “BIODIVERSIDAD”?

Si atendemos a la definición exacta, la biodiversidad se describe como “la variedad de la vida y es el componente vivo de lo que pueden considerarse reservas de capital natural”. Cuando pensamos en “biodiversidad” nos vienen a la mente animales, flores y plantas. Pero en realidad, abarca todo lo que tiene vida, desde los genes hasta los ecosistemas. La biodiversidad es mucho más que una simple definición. Es una fuente de vida, un compañero. Representa el hogar, la libertad o incluso el amor.

Cada aspecto de la biodiversidad desempeña un papel muy importante en nuestro planeta. El impacto de perderlos devastará no sólo a nosotros, sino a los ecosistemas que nos rodean y sostienen el planeta.

 

La industria de la moda está acercando la selva amazónica al punto de inflexión de un colapso irreversible del ecosistema”.

 

MODA Y BIODIVERSIDAD

¿Cómo afecta la moda a nuestra biodiversidad? Desenterremos los secretos de la biodiversidad en la moda. 

 

CÓMO AFECTA LA PRODUCCIÓN DE MODA A NUESTROS BOSQUES

CULTIVOS DEVASTADORES

La industria de la moda ha causado diversos desastres y daños al entorno natural. Principalmente, la producción de prendas de vestir provoca una intensa deforestación. La mala gestión de los cultivos, sobre todo del algodón, y los monocultivos dejan infértil un suelo precioso debido a los pesticidas.

La viscosa (un tejido semisintético, a menudo utilizado como sustituto de la seda) también es un problema. Para obtener el textil, que se encuentra en los árboles, se destruyen inevitablemente los bosques. En la fabricación de materiales, ya sean de origen natural o artificial, se utilizan y explotan el agua, la tierra y la energía. La industria de la moda agota estos recursos sin dar tiempo a que las fuentes se repongan, asfixiando lentamente el medio ambiente que tanto necesitan. Como consecuencia, los seres vivos tienen menos oportunidades de alimentarse, vivir y reproducirse libremente.

 

EL CUERO Y LA TIERRA

El pastoreo de ganado y sus subproductos están acabando con las selvas tropicales. En total, la ganadería es responsable del 80% de la deforestación actual en toda la Amazonia. Puede que no esté claro cómo contribuye la industria textil a esta destrucción. Sin embargo, una investigación reciente de la organización ecologista Stand Earth descubrió que un gran número de marcas de lujo y convencionales (como Adidas, H&M, Zara, Gap, Prada y muchas más) han contribuido en gran medida a la deforestación del Amazonas. Esto se debe al uso que hacen del cuero en sus zapatos y accesorios. Según Stand Earth, “la industria de la moda está acercando la selva amazónica al punto de inflexión de un colapso irreversible del ecosistema”.

 

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© Photo boards

CÓMO AFECTA LA PRODUCCIÓN DE MODA A NUESTROS OCEÁNOS

TRANSPORTE DE PRENDAS

El mar tampoco se libra de la destrucción generada por la industria de la moda. Los estudios se centran en el problema de los microplásticos. La ropa que vestimos está compuesta de poliéster (un tipo de resina plástica obtenida del petróleo mediante una sucesión de procesos químicos). Nosotros, como consumidores, al lavar la ropa, arrojamos agua contaminada que llega a ríos y mares, donde las especies nadan entre microplásticos. Se cree que los textiles aportan alrededor del 35% de los microplásticos que contaminan los océanos. Los plásticos de microfibras ya existen en todos nuestros océanos, incluso en las profundidades marinas, en los núcleos de hielo del Ártico y son ingeridos por los peces.

 

DERRAMES DE ACEITE

La mayoría de los tejidos utilizados en la industria de la moda rápida se fabrican a partir del petróleo, un combustible fósil no renovable. El poliéster, por ejemplo, es la fibra más utilizada en el mundo. El nailon, otra fibra muy popular, también se obtiene del crudo. Sólo en 2015 se utilizaron más de 330 millones de barriles de petróleo para fabricar poliéster, nailon y otras fibras. Este uso del petróleo contribuye a los efectos devastadores de los vertidos de petróleo en nuestros océanos. Los vertidos de petróleo son habituales y cada uno de ellos es devastador para el medio ambiente. La vida marina inhala o consume este petróleo tóxico, que afecta a su sistema inmunológico e incluso puede hacerla estéril.

 

BASURA Y AGUAS RESIDUALES

La industria de la moda es responsable del 20% de las aguas residuales mundiales. Muchas prendas utilizan procesos de teñido y acabado basados en productos químicos tóxicos que se filtran a los ríos y a los sistemas de aguas subterráneas, produciendo estos residuos tóxicos. La moda rápida opera especialmente en países con menos legislación sobre el vertido de residuos. Dejando entornos cruciales en India, Bangladesh y muchos más infectados con aguas contaminadas, que acaban por extenderse al mar. El uso de fertilizantes para la producción de algodón es otra fuente importante de contaminación del agua, que contamina fuertemente las aguas de escorrentía y las aguas de evaporación.

 

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© OCG saving Oceans

OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), también conocidos como Objetivos Mundiales, son un llamamiento a la acción mundial para acabar con la pobreza, proteger el planeta y garantizar que todas las personas disfruten de paz y prosperidad. Incluyen el Objetivo 13 sobre la acción por el clima, el Objetivo 14 sobre la vida submarina y el Objetivo 15 sobre la vida en los ecosistemas terrestres.

 

Un millón de especies están en peligro debido a las consecuencias de la llamada “sexta extinción masiva”.

 

OBJETIVO 13

La concentración de CO2 en la atmósfera se ha acelerado en los últimos años y sus consecuencias han sido el calentamiento de los océanos, la subida del nivel del mar, el deshielo de los polos, tsunamis, incendios y terremotos, entre otros desastres naturales. “El ODS 13 pretende introducir el cambio climático como una cuestión clave en las políticas, estrategias y planes de los países, las empresas y la sociedad civil, mejorando la respuesta”. Para cumplir este objetivo se deben establecer estrategias para reducir sus emisiones de CO2 a la atmósfera, fomentar el uso de energías renovables e invertir en el desarrollo de innovaciones tecnológicas más sostenibles y menos intensivas en emisiones.

 

OBJETIVO 14

El Objetivo 14 pretende Conservar y utilizar de forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos. El océano es crucial para la economía mundial. El 90% del comercio, utiliza el transporte marítimo, cables submarinos para telecomunicaciones, entre otros como la moda. Todos estos aspectos contribuyen en gran medida a la destrucción de la vida submarina.

 

OBJETIVO 15

Los ecosistemas terrestres proporcionan aire y aguas limpias y constituyen el hábitat de millones de especies animales y vegetales, indispensables para la humanidad. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), advierte que de los 8 millones de especies que existen actualmente en el planeta, un millón están en peligro debido a las consecuencias de la llamada “sexta extinción masiva”.

Para alcanzar estos objetivos, la moda debe cambiar su forma de trabajar y poner de su parte para lograrlo. Si la industria se comprometiera a evitar todo tipo de sustancias tóxicas, utilizara materiales sostenibles y de calidad para que las prendas tengan una larga vida de uso y cambiara sus modelos de negocio para evitar largos viajes para llegar a sus puntos de venta en todo el mundo, estaría reduciendo la contaminación del aire, el agua y el suelo.

Pero esto es un trabajo en equipo entre gobierno, consumidores e industrias, es responsabilidad de todos exigir estos cambios, cuidar nuestro planeta y cambiar nuestros hábitos de consumo, seamos responsables de lo que consumimos.

 

 

Highlight Image:
San Sebastián  © Aiony Hust via Unsplash

+ Words:
Carmen Espinoza
Luxiders Magazine

 

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