Activismo de Moda | Entrevista con Clare Press, Australian Vogue’s Sustainability Editor-at-Large

 
 

 

Clare Press está en muchas de las conversaciones cuando el tema trata sobre moda sostenible. En los últimos dos años, muchos de los diseñadores de moda sostenible entrevistados por Luxiders Magazine la señalan como una de las personas que más inspiradoras en el sector. La presentadora del podcast Wardrobe Crisis –cuya descarga recomendamos– y Australian Vogue's Sustainability Editor-at-Large, se está convirtiendo en una poderosa activista de la moda. ¿Por qué lo hace? Lee nuestra entrevista exclusiva con ella.

 

Esta entrevista aparece originalmente como parte de un gran artículo sobre el activismo de moda,
publicado en la edición impresa de Luxiders Magazine N.3, AW 2019/20, a la venta AQUÍ.

 

En 2018, Clare Press se convirtió en Embajadora Global de la iniciativa Make Fashion Circular de la Fundación Ellen MacArthur. Forma parte del equipo del Fashion Roundtable en el Reino Unido, y ha sido miembro de la junta asesora australiana de Fashion Revolution desde 2014. Es miembro de la Junta Asesora de Sostenibilidad de Copenhagen Fashion Week y es una de las Expertas en Contenido de la Global Fashion Agenda. En 2019, fue nombrada una de las 100 Mujeres más Influyentes por Australian Financial Review.

Apasionada defensora de la economía circular y de la moda sostenible y ética, es la principal periodista de la industria a nivel mundial en este sentido. Clare es autora de tres libros: "The Dressing Table" (Penguin, 2011), una colección de ensayos sobre estilo; "Wardrobe Crisis, How We Went From Sunday Best to Fast Fashion" (Nero), nombrado uno de los mejores libros de 2016 por The Age y el Sydney Morning Herald; y "Rise & Resist, How to change the world", sobre activismo y publicado por Melbourne University Press en octubre de 2018.

 

¿Por qué te convertiste en activista de la moda?

 

Cambié mi vida profesional para centrarme en la moda sostenible después del desastre de la fábrica Rana Plaza. Me uní a la junta asesora de Fashion Revolution y decidí usar mi voz y mi plataforma como periodista de moda establecida para abogar por una industria de la moda más sostenible. También escribí un libro,"Wardrobe Crisis, How We Went From Sunday Best to Fast Fashion", examinando nuestro sistema roto por la moda rápida. Pero no creo que me hubiera llamado activista de la moda en aquel entonces ...

 

Creo que todos deberíamos ser activistas para abogar por un cambio en las áreas que son importantes para nosotros. Ahora pongo todas mis energías en el activismo de la moda. Quiero desesperadamente que esta industria, que ha sido mi hogar profesional durante las últimas dos décadas, limpie su actuación.

 

La moda puede ser una fuerza poderosa para un cambio positivo, particularmente en términos de empoderamiento económico femenino. Hay más de 60 millones de trabajadores de la confección en todo el mundo y la mayoría son mujeres jóvenes con niños. Por desgracia, a la mayoría no se les paga un salario digno.

La industria de la moda también tiene terribles impactos en el medio ambiente. Nuestro sistema lineal actual se basa en coger usar y descartar. Da como resultado una sobreproducción y cantidades ridículas de residuos de moda y textiles. En Australia, donde vivo, las personas consumen una media de 27 kilos de moda y textiles cada año, y arroja 23 kilos en la basura anualmente. ¡Es de locos! El sistema actual ejerce presión sobre los ríos y los suministros de agua dulce, el suelo (debido a la producción de algodón) e incluso los océanos (debido a la contaminación por microfibras). Soy activista porque creo que la moda puede y debe ser regeneradora y restauradora..., y justa.

 
 
 
 
 
 
 

 

¿Qué estás haciendo para reducir los problemas generados por la industria de la moda actual?


Estoy a punto de comenzar una desintoxicación de compras de 3 meses como parte de la campaña Slow Fashion Season (Junio 2019), lo cual es un poco controvertido para mí, dado que trabajo en revistas de moda.

Mi amigo Cameron Saul, fundador de Bottletop, me persuadió durante nuestra entrevista para el podcast, para que intentara que la gente pensara en su consumo. Lo pensé con mucho cuidado porque creo firmemente en el apoyo a las empresas de moda éticas y sostenibles comprometidas con mejorar la moda, especialmente las pequeñas.

Sin embargo, estoy haciendo esto en protesta por el fracaso del gobierno del Reino Unido en tomar en serio el Environmental Audit Committee’s Fixing Fashion Report (Informe de moda del Comité de Auditoría Ambiental). Los parlamentarios rechazaron las recomendaciones del informe, lo cual es decepcionante.

 

Soy activista porque creo que la moda puede y debe ser
regenerativa y restauradora..., y justa.

 


¿Qué objetivos te has fijado alcanzar el próximo año 2020 y en qué proyectos estás colaborando actualmente para lograr estos objetivos?


Estoy entusiasmada con el crecimiento de Wardrobe Crisis. La primavera pasada fui a Hamburgo para grabar un episodio con Kirsten Brodde, de Greenpeace Alemania, quien dirigió la Campaña Detox.

La Ethical Fashion Initiative, que forma parte del Centro de Comercio Internacional de las Naciones Unidas, me encargó producir nuevas series del podcast sobre cómo la organización está usando la moda ética para avanzar en los Objetivos Globales de las Naciones Unidas. Estos 17 objetivos, también conocidos como los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, son el mejor marco que tenemos para un futuro sostenible. El podcast se lanzó en septiembre.

Mi gran objetivo personal es escribir (y terminar) mi cuarto libro, que trata sobre el futuro de la moda.

 

+ info: Clare Press

+ postcast: Wardrobe Crisis