Alimentos para el cerebro: cómo los alimentos pueden mejorar nuestra salud mental

 

 

Cuando la gente busca mejorar su salud física, la dieta suele ser el primer lugar al que acuden. ¿Pueden reducir los carbohidratos, alejarse de los snacks? Sin embargo, menos personas son conscientes del poder de nuestra dieta para afectar a nuestra salud mental. Los nutrientes que introducimos en nuestro cuerpo tienen un poderoso efecto en nuestra salud mental, pero a menudo de forma sutil. Veamos cómo la dieta puede afectar a la salud mental y algunos consejos sobre qué poner en el plato para mejorar el bienestar mental.

 
 

 

¿PUEDE LA COMIDA AFECTAR A NUESTRA FORMA DE PENSAR?

Somos lo que comemos. Los alimentos que consumimos y los nutrientes que contienen tienen un impacto directo en nuestro cuerpo y, por lo tanto, en nuestro cerebro. Mientras que esta relación es clara para nuestra salud física -un momento en los labios, para siempre en las caderas-, es más compleja con nuestro bienestar mental. Los alimentos que ingerimos, desde las grasas y las proteínas hasta las enzimas específicas, se convierten en los bloques de construcción de nuestro cerebro. Es más, la forma en que pensamos y sentimos no proviene únicamente del cerebro. Los científicos están descubriendo cada vez más las complejas conexiones entre nuestro bienestar mental y las bacterias intestinales. La expresión "lo siento en mi interior" se basa en esta conexión: un desequilibrio de las bacterias en nuestro intestino puede conducir a un estado de ánimo más bajo y a un aumento de la ansiedad.

Como no hemos aprendido a pensar en la comida como algo estrechamente relacionado con nuestro bienestar mental, a menudo es difícil ver los efectos de lo que comemos. Pero si cambiamos nuestra dieta, podemos mejorar nuestro estado de ánimo. Veamos algunos alimentos a los que hay que dar prioridad para tener una perspectiva mental positiva.

 
 
 
 
 

CARBOHIDRATOS COMPLEJOS 

Los hidratos de carbono complejos son moléculas de azúcar largas, como las que se encuentran en los cereales integrales, los guisantes, las judías y la fruta. Los carbohidratos son vitales para los sistemas energéticos de nuestro cuerpo y se ha demostrado que los carbohidratos complejos influyen en la liberación lenta de glucosa en nuestro sistema, lo que puede tener un efecto estimulante del estado de ánimo.

Los hidratos de carbono complejos se contraponen notablemente a los hidratos de carbono simples, moléculas de cadena corta que se encuentran en los snacks habituales, como las bebidas azucaradas. Los carbohidratos simples provocan fluctuaciones drásticas en los niveles de glucosa y azúcar en nuestro cuerpo, lo que a menudo da lugar a un rápido pero insostenible aumento del estado de ánimo. Es posible que notes antojos de estos alimentos debido a la mejora a corto plazo de nuestro estado de ánimo, pero a esto le suele seguir un bajón. Los hidratos de carbono complejos mejoran de forma duradera nuestra energía y nuestro estado de ánimo, así que la próxima vez que tengas ganas de picar algo, prueba tomar una pieza de fruta.

 

OMEGA-3

El omega 3 es un ácido graso que se encuentra frecuentemente en pescados como el salmón y la caballa, pero los frutos secos, las semillas y ciertos aceites como el de linaza y el de canola también son ricos en omega 3. El omega 3 es un componente vital de las membranas celulares de nuestro cerebro y puede influir en la forma en que las sustancias químicas del cerebro, como la dopamina y la serotonina, intrínsecamente relacionadas con nuestro bienestar, pueden viajar por el cerebro.

El cuerpo no produce omega 3 y la única fuente de este nutriente esencial para nuestro cerebro es la comida que ingerimos. Las personas con deficiencias de omega 3 pueden ser más susceptibles de sufrir estados de ánimo bajos debido a la inhibición de la transferencia de serotonina y dopamina, por lo que, si lo que quieres es que tu bienestar sea lo primero, prioriza el consumo de estos alimentos ricos en grasas.

 
 
 
 
 

ANTIOXIDANTES

Los antioxidantes, llamados así por la forma en que limitan la oxidación en nuestro cuerpo, tienen un poderoso efecto en nuestro bienestar mental. La oxidación es un proceso natural que libera energía, pero también provoca estrés oxidativo en nuestro cerebro. Al limitar este proceso, los antioxidantes permiten que sustancias químicas como la dopamina y la serotonina florezcan en nuestro cerebro, lo que conduce a una mayor felicidad y positividad.

Los antioxidantes se encuentran en una serie de alimentos, desde los arándanos hasta el té verde. Asegurar un consumo regular de estas sustancias químicas puede favorecer nuestro estado de ánimo y reforzar el bienestar. No hay nada como una buena taza de té.

 
 
 
 
 

BON APPETIT

Hacer cambios en tu dieta puede tener un impacto positivo en tu bienestar mental tanto de forma directa como indirecta. Apoyar el crecimiento productivo de las bacterias intestinales puede mejorar el estado de ánimo y el consumo de omega-3 puede fortalecer el tejido cerebral y mejorar la función cognitiva. Sin embargo, los efectos indirectos de una dieta saludable sobre nuestro estado de ánimo pueden ser igualmente importantes. Con más energía y un fuerte sentido de cuidado de nuestro cuerpo, verás que una variedad de cambios positivos llegan de forma natural. Adopta hoy mismo medidas para mejorar tu salud mental.

 
 
 

   +  Words: Regina Wheeler

Regina Wheeler is an elearning consultant at Academicbrits.com. She has an independent nutritionist practice based in Boulder, Colorado. When she isn’t working or writing she loves running in the Rockies, reading and drinking coffee in cozy cafes.