Sólo un aspecto parece ralentizar el proceso, y es la inacción de quienes hacen las leyes y las controlan, y de los grandes jugadores de la moda, a los que está costando demasiado tiempo mejorar sus estructuras y prácticas.
La buena noticia que heredamos del 2018 es que para las marcas, se ha hecho imposible esconder malas prácticas debajo de la alfombra. Ya no es posible, o al menos ya no es tan fácil, mantener a sus consumidores en las tinieblas, ni manipularlos con bajas estrategias de marketing. Y es que es el mismo público el que está exigiendo mayor transparencia de parte de la industria, y un marco legal acorde a las circunstancias de parte de los gobiernos.
La ONG Fashion Revolution, que trabaja por una mayor transparencia en la industria de la moda, desveló justo antes de Black Friday, los resultados de una encuesta que realizó para descubrir cómo la transparencia y la sostenibilidad de la cadena de suministro afectan en las decisiones de compra de los consumidores cuando buscan ropa, accesorios y zapatos. El objetivo fue también entender qué información desean los consumidores que marcas y retailers compartan con respecto a sus impactos sociales y ambientales, y qué papel piensan que deben cumplir los gobiernos y las leyes para garantizar que la moda se produzca de manera sostenible.
Esta es la primera gran encuesta realizada por la ONG, y fue llevada a cabo por Ipsos MORI, una encuestadora especializada en investigación de opinión y mercado global. La encuesta se realizó online, a 5.000 personas de entre 16 y 75 años en los mayores cinco mercados europeos: Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y España.
© Fashion Revolution
Analicemos algunas conclusiones del informe:
Los resultados muestran que los consumidores exigen la responsabilidad tanto de las marcas como de los gobiernos para garantizar una producción sostenible y que cuestiones clave como pobreza global, salarios justos, protección del medio ambiente, cambio climático y desigualdad de género estén siendo abordados.
La mayoría de las personas encuestadas piensa que los gobiernos desempeñan un papel crucial para garantizar que la ropa esté hecha de manera sostenible y que las marcas divulguen información acerca de cómo se fabrican las prendas, zapatos y accesorios, con qué proveedores están trabajando, y si están teniendo prácticas social y ambientalmente responsables en sus cadenas de suministro.
Ahora veamos qué temas son más importantes para los encuestados:
La encuesta revela que más de una de cada tres personas considera los impactos sociales (38%) y ambientales (37%) a la hora de comprar ropa, accesorios y zapatos. Y a la vasta la mayoría de las personas les gustaría saber más acerca de dónde están hechas las prendas y quién las hace, así como de qué manera las marcas están abordando temas sociales y cuestiones ambientales:
A inicios de diciembre, el 2018 nos dejaba con las últimas buenas noticias. Fue gracias a la última encuesta global de Accenture Strategy a casi 30.000 consumidores en 35 países. Indica que todo optimismo hoy tiene una base fehaciente. Según la encuesta, dos tercios de los consumidores de todo el mundo prefieren comprar productos de compañías cuyo propósito "refleja sus valores y creencias personales“. Accenture encontró que el 62% de los consumidores quiere que las empresas tomen una posición sobre temas actuales y de gran relevancia como la sostenibilidad, la transparencia y prácticas de empleo justo. El hecho de que la moda apele a nuestras sensaciones, a nuestras emociones y nuestro instinto, junto con la mayor información que manejamos, ha sido la combinación perfecta para despertar sensibilidades más responsables.
Cyrill Gutsch, fundador de Parley for the Oceans (dedicado a preservar los océanos y eliminar el plástico), dijo: “[La moda] tiene un gran papel que desempeñar en el medio ambiente, porque [habla a] las personas en un nivel emocional e instintivo. Habla del deseo y la belleza, y nos permite transmitir este mensaje tan serio sobre la fragilidad del planeta de una manera que no es un sermón. Es positiva y es efectiva". Si sumamos a ello el hecho de que es cada vez más fácil para los usuarios acceder a opciones y optar por prácticas con menor o nulo impacto negativo en el planeta y las personas, los cambios no sólo son inminentes, sino además lógicos.
Mientras más y más personas comprenden que sus acciones (o inacciones) sumadas pueden generar cambios masivos o tener consecuencias masivas, el paso que muchos estamos esperando, el que más está demorando en llegar, es el desarrollo y la implementación de marcos legales que regulen efectivamente las prácticas empresariales, partiendo del reconocimiento de la existencia de la exclavitud moderna y de la destrucción del planeta como un crimen punible, empezando por los países donde esas empresas tienen su base y hacen su toma de decisiones.
+ info: Fashion Revolution
+ words: Mariángeles Aguirre. Ella es fundadora y diseñadora especializada en upcycling tHERAPY Recycle & Exorcise & Responsable de Social Media Fashion Revolution Germany / Future Fashion Forward e.V.